lunes, 9 de diciembre de 2013

~Día no registrado, pero si guardado~

Buena parte de mi vida es imaginar un montón de cosas que quiero que pasen, obviamente a que realmente pasen es otro cuento.
Estaba sentada en el autobús, concentrada pasando algún nivel de "tetris" cuando mire por la ventana, en la parada estaba un muchacho, cabellos negros algo largos y revueltos, sus ojos oscuros y quizás era algo "punk" lo que sí sabía era que me encantaba.
Unos segundos de contemplación y otros segundos más para pensar: "ojalá subiera al bus". No habían pasado ni cinco segundos cuando desvíe la mirada nuevamente al teléfono para seguir con mi juego de "tetris" cuando ya queria echar una última mirada. Levante levemente los ojos, pero ya no estaba ahí. Decepción.
Mi ojos volvieron al teléfono y se concentraron dos o tres minutos cuando nuevamente perdí en ese descardo juego. Mire a mi izquierda para saber quién se sentaba junto a mi, y "Baaam" el chico de la parada estaba junto a mi. Concentrado en algún solo de guitarra que pasaba por sus audífonos y yo ahí casi sin aire. Voltee hacía la ventana a mi derecha. Y volví la mirada al frente, cuando de la nada escucho: "bonitad pulseras, ¿fall out boy, no?"
"Eh... ah, sí, si." Respondí. 
No hubo más conversación pues la siguiente parada era la mía. Solo le sonreí y el me devolvió esa respuesta junto con ese clásico despido de agitar la mano.

Ojalá deseara ganar la lotería, y pasará.

No hay comentarios:

Publicar un comentario